lunes, 21 de diciembre de 2015

- All I want -

Llevo horas escuchando la misma canción,
conteniendo un diluvio interno que asfixia tanto como no tenerte.

Hay resacas y tristezas que no se curan,
amores tampoco.

Hay silencios que explotan y ensucian todo,
personas también.

Hay lugares que huelen a recuerdos

y recuerdos que ahora son lugares,
en mi mente.

Que el sol no se tapa con un dedo,
ni tus besos con otros labios.

Que ya falta poco para no seguir echándome de menos
contigo,
aunque poco suene a eternidad
y eternidad seas tú.

jueves, 1 de octubre de 2015

141.

Le tengo miedo al tiempo,
a estar siempre a deshora.

Me trago los suspiros,
me limpio los besos que se me caen de la boca,
no me toco las heridas
y sonrío cuando sólo quiero llorar.

Bordeo precipicios
y sueño con saltarlos.

Me declaro guerras perdidas,
porque perdida ya estoy,
no quiero,
porque me cuesta quererme.

Y eso tú ya lo sabes.

martes, 1 de septiembre de 2015

Siento urgencia, no sé si es de ti.

Nos hicimos expertos en caminar cuerdas flojas,
bordeamos precipicios con los ojos cerrados,
aceleramos hasta confundir fantasía con realidad,
saltamos vacíos que burbujeaban,
nos quemamos con verdades y hasta llegamos a sonreír con una mentira.
Sonreír, palabra puta.

Nos inventamos días, 
le sumamos horas a esos días, 
daños también,
besos,
besos que aruñaban cada poro de la piel. 

No creíamos en un mañana si el hoy éramos nosotros,
nos rompimos, 
nos comimos cada cristal sin importar cuánta sangre había de por medio. 

Y cómo no amarte,
cómo no odiarte,
si aprendimos a hacernos heridas que brillaban, 
aprendimos a mordernos el corazón, 
que aunque doliera, 
no había nada más maravilloso que eso. 

Ya no sé qué es echarte de menos, 
pero a veces algo me urge, 
supongo eres tú. 

Nos hicimos, 
nos bordeamos, 
nos aceleramos, 
nos saltamos, 
nos quemamos, 
nos sonreímos,
nos inventamos,
nos aruñamos, 
nos rompimos, 
nos aprendimos, 
nos enamoramos, 
enamorarse, 
palabra puta. 

domingo, 19 de julio de 2015

Feliz cumpleaños, pequeño.

Soy un cristal roto para los buenos deseos,
pero hoy me he quitado la armadura,
te he envuelto el mundo en folios llenos de corazones
y he hecho un lazo con 21 tiritas.

Del otro lado del charco,
también te versan.

Que los poetas cumplen d(años),
pero las grietas también sonríen.

Y tu sonrisa vale por mil.

Cierra los ojos, pide un deseo.

¡Feliz cumpleaños!

domingo, 12 de julio de 2015

Dejar ir nunca había sido tan amargo.

“Llorar.
Detenerse.
Volver a llorar.
Doler.
Doler menos.
Volver a llorar.
Gritar.
Fuerte, muy fuerte.
No parar de llorar.
Silencio."

Supongo es una síntesis de cómo se siente arrancarse a alguien del corazón.

Hoy decidí pasar la página,
arrancar las ruinas de raíz,
las ruinas de mi corazón,
arrojarlas a la basura,
deshacerme de todos los recuerdos
y desconocerme,
desconocerme tanto que no pueda acordarme de ti.

Espero a partir de mañana empezar a creer en milagros,
creer en este deseo necesario de sacarte de mi vida de una vez por todas,
son demasiadas heridas ya,
demasiadas lágrimas carentes de sentido,
demasiada indiferencia a estos sentimientos cansados de sentir.

Hoy decidí pasar la página,
no acordarme siquiera de tu nombre, llorar hasta secarme,
abrazarme muy fuerte,
únicamente con la puta esperanza de que al amanecer no conserve de ti ni tus viejas y oxidadas huellas.

Hoy me desprendo del peso de mis ganas,
fuego frío,
retroceder el tiempo,
tenerte un segundo más,
de ti.

Te dejo ir.

Con gritos, lágrimas, con las uñas y el alma, dejo ir todo.

No ha sido más que el peor acto de amor,
una putada de historia,
lo inconcluso hecho piel.

Pero hoy borro los dos puntos suspensivos y dejo el final.

Vete a la mierda.
Y no vuelvas.

jueves, 21 de mayo de 2015

Tal vez nunca sepas que esto es para ti.

Te imagino como la pequeña gota de agua de un sediento en medio de un desierto.

Te imagino como ese atardecer que a veces deseamos que sea infinito.

Te imagino.

Te imagino como una tonta.

Te imagino como la montaña más alta que algunas veces parece inalcanzable.

Te imagino como arena entre dedos, tan real y a la vez tan efímera.

Te imagino, conmigo.

Te imagino creyendo que el mundo es completamente tuyo e invitándome a hacer un nido en él.

Te imagino con ganas.

En mi cama.

Te imagino amándome.

Te imagino risueño entre mi brazos.

Te imagino como el sitio más seguro.

Te imagino a ti, tan fugaz, que me toca cada vez que te imagino, despertar.

lunes, 27 de abril de 2015

Esto es una declaración de culpa.

Tal vez debería empezar esto diciendo que una vez me enamoré del idiota más idiota de todos y que aún no consigo olvidarle.


No me hacía falta brújula si tenía tus ojos

ni mapa si me dabas la mano
No me importaban las puñaladas si eran por la espalda 
y con tus brazos 
muchos menos, las balas que salían de tu boca 
más de una vez me hice herida y tú te hiciste dedo 
no parabas de tocarme, de dolerme
Pero también te hiciste dedos en otras ocasiones
y sí, tampoco parabas de tocarme
y sí, yo tampoco paraba de gemir. 

Quiero decir que aprendí a ser fuerte en medio de un derrumbe 

y justo se llamaba como tú
que me enamoré de unos escombros 
que me lamí la sangre de la piel 
que te lamí la sangre de la piel 
por eso de que la mejor cura viene de nuestra boca
pero no soy cura
ni tú creyente en milagros 
y ya ves 
reconstruir una ruina nunca fue una buena opción.

Mi cuerpo no es más que un archivo de huellas
donde las tuyas 
son las únicas que se mantienen intactas 
extraño cuando nos creíamos dueños del tiempo
y lo manejábamos a nuestro antojo
excepto cuando nos dijimos adiós.

Aprendimos a mentir juntos 
y nos mentimos 
Reinventamos el odio-amor 
y salimos odiándonos sin remedio 
con pocas reservas de amor
y con moretones en el alma 

Pero también guardamos los mejores amaneceres 

con ojeras 
desnudos 
tendidos en una cama

Guardamos la vida en una mano 

y parte de la queríamos a futuro en otra

Guardamos los poemas escritos con el lápiz de un destrozo 

y es que razón tiene Escandar
'que la poesía pague los destrozos...'
aunque a estas alturas tengo una deuda impagable.

Que te extraño, que tal vez tú a mí no.


Que te amaba por encima de todas las cosas 

que sí
que fuiste, eres y serás el amor de mi vida.

Puedo soltar las lágrimas.

lunes, 20 de abril de 2015

Nunca he sido demasiado tuya, 
de hecho, nunca he sido siquiera mía.
Nunca he cerrado los ojos para besar,
jamás he sabido qué es correrse por amor. 
Y perdón...
Pero abrázame antes de disparar.

Nunca te extrañé demasiado,

nunca te amé como decía, 
nunca me aprendí de memoria tu cuerpo, 
incluso nunca idealicé una vida contigo.

Nunca estuve en tus manos, 

siempre fui parte de los cien volando 
y es que acaso,
¿no era mi libertad por la que tanto brindabas? 

Abrázame antes de disparar, por favor,

que de tus brazos siempre han salido las mejores balas
y mira que si se trata de morir prefiero tus brazos,
que mi cama.

Te quiero, pero sin mí,

tranquilo, esta no es la primera que tomo mis maletas 
y me voy a la mierda,
así que no me detengas.
Olvida mis pasos al atravesar el quicio,
la memoria no es más que una bomba de tiempo que te explota en la cara.

Pero eso sí,
por favor, 

bésame antes de disparar.

martes, 27 de enero de 2015

II

Quiero ser las 6:14 am de tu reloj.

Quiero quedarme en tus estaciones
pero comenzando desde tus piernas.

Quiero ser tus días, tu música.
Quiero enredarme en tu cabello
y que seas mi musa, mi folio en blanco
donde escribir poemas de amor sea uno de mis placeres favoritos,
después de ti,
claro.

Quiero que mis amaneceres tengan tus ojos
y que pueda divisar el sol desde tu pecho.

Quiero que seas mi café de cada mañana
y que a tu lado los cigarrillos no parezcan matarme de a poco.

Te quiero conmigo,
a mi lado,
entre mis manos,
sobre mi cuerpo
pero sobre todo aquí muy cerca de lo que parecen ser las ruinas de un corazón.

Quiero que la locura nos empape la sonrisa
y que Sabina me ayude a explicarte
que lo que realmente quiero
es que mueras por mí.